Título: REBELDES. Las campañas de Sertorio en Hispania
Autor: Pedro Santamaría
Editorial: Pámies

Es el año 88 AC, el joven Cneo de 14 años conoce a Sertorio en una obra de teatro.  Cneo admira a este hombre tuerto del cual se cuentan historias de leyenda. Es un héroe de Guerra.

Sertorio es enviado como Procónsul a Hispania para acabar con una rebelión. Durante su ausencia, dos hombres se disputan el poder de Roma: Cayo Mario y Lucio Cornelio Sila.
La guerra civil es sangrienta. Sila acaba con Cayo Mario y ordena que Sertorio regrese a Roma donde sus legiones serán licenciadas. El Sabino (Sertorio) desconoce a Sila y se convierte en Rebelde por no acatar las ordenes.

Poco a poco es abandonado por sus legionarios que se pasan a las filas de Sila. Sertorio con pocos hombres (cerca de mil romanos) es llamado por los celtíberos para liderar la rebelión. Con pocos hombres entrenados y muchos nativos hispanos sin formación militar, comienza una guerra de guerrillas.

Sila envía una legión tras otra para acabar con Sertorio, pero éste sabe mantenerse al filo de la derrota.

A estás alturas en mi lectura ya sentía simpatía por el Tuerto.

El final es trágico. Sertorio es un personaje real que existió.

Cuenta el autor Pedro Santamaría, que el tenía 14 años cuando estaba en la escuela y durante la clase de historia, escucho por primera vez acerca de Sertorio y de las campañas en Hispania.

Es costumbre mía poner un poco de narrativa

<<La herida duele, “No es nada”, te dices. Solo un rasguño. Jadeas, estas cansado.

-¿Qué hacemos Señor? – dice una voz joven a tu lado.

Observas al muchacho. La pregunta resulta casi enternecedora, hay fe en ella, la fe de un joven que la derrota es imposible.

-¿Señor? – repite el muchacho – ¿Qué hacemos?
El enemigo avanza lenta y firmemente. Sus pisadas hacen temblar la tierra

-¡Conmigo! – gritas a los pocos leales que están cerca – ¡Conmigo! – vuelves a aullar.

Acabas de sentenciar a muerte al centenar escaso de hombres que atienden tu llamado. Entre ellos al muchacho. Otros tantos huyen, pero ya nada importa. Debes mantenerte desafiante hasta el final por los que cayeron, por los que creyeron en ti….  >>>